Pienso un momento, siempre he estado aquí sin dirigir a nadie, sin mandar a nadie, la “democracia” que ellos tanto cacarean concretamente no se exhibe, no la veo, me discrimina como una bestia; me corrompen y me satanizan como un anticristo de esta sociedad robótica y programada. No le veo el fin de este tormento, sigo siendo político y lo que hago es segar a mis contrincantes con sus sentimientos y lo que hicieron en un pasado; allí están esos enemigos, son hijos del diablo, engendros del demonio, esos conservadores que nunca hacen nada, piensan que la mujer es para estar en la casa y de paso creen que es “inferior” a los hombres; esos derechistas de mierda me las pagarán, les diré a todos quienes son en realidad, los desenmascararé. Ahora me voy al discurso.
Hola a todos amigos seguidores y comandantes de la Word Wide Web, en esta ocasión les hablaré de un tema un tanto polémico pero que a la vez, es involuntariamente usado en las personas para manipular a masas enteras atacando principalmente en señalar los defectos, errores o desvirtudes de sus contrincantes, y así conseguir la popularidad, que bien es sabido y comprendido llegar al populismo, pero uno de sus métodos es la mismísima demagogia. Pues bien, analizaremos y concluiremos en cuanto en concepto de esta rama llevo de conocimiento. Desde ya les digo que este método es excesivamente absurdo.
La demagogia para mí desde luego me parece un método absurdo de conseguir la popularidad de una sociedad determinada, en “pro” de quedar como “campeón” en alguna charla, discurso, conferencia, juicio, comicios electorales, disputas personales, etc., etc, etc. pero el medio que ésta conlleva es de pisotear la idea de los demás, o conseguir mediante estúpidos discursos y atacando “ad hominem” descalificando al adversario diciendo un monto de tonterías, que bien, pueden ser verdad, pero no justifica ni es correcto señalarlos bajo un juego judicial donde se debe presentar toda una seriedad y cortesía para tener moralidad.
Demos un ejemplo para su máxima comprensión: supongamos que existen dos personas, y estas dos personas deben competir para conseguir el liderazgo de una civilización, en otras terminologías son dos personas que se disputan quien será el presidente de un país, y compiten mediante comicios democráticos, pues resulta que ambos son de partidos distintos, uno es de derecha representando el conservadurismo, y el otro es de izquierda representando al progresismo, pero en vez de señalar y hablar sobre sus proezas y la manera en que solventarán problemas, lo que hacen es señalar los defectos de cada uno, que pueden ser tanto en sus antecesores como el prejuicio básico que cada persona emite por la vanidad y el orgullo de sí misma. Es por eso que dicen que los políticos ganan dinero sucio, y de cómo pueden ganar el voto de las masas. Usando el egoísmo personal se llegan a estas cosas, sin medir que ambos pueden mejorar a la civilización, empero esa actitud mediocre y estúpida del ser humano es la que llega a estos fines, esa vanidad de “yo conocer mejor que tú” que se las creen de “intelectuales” sin embargo no son más que Ignorantes Ilustrados.
Ahora, la política no es el único campo donde se puede hacerse demagogia, pues cubre una amplia gamma
tanto de ideologías y posturas filosóficas como las creencias religiosas y otras de escepticismo y racionalismo como los son el ateísmo, agnosticismo, entre muchas otras. Y los hemos vistos, principalmente en YouTube, donde se han organizado para dar una batalla sin fin, una cyber-guerra entre creyentes y ateos, unos defendiendo la idea de Dios, Jesucristo y el Espíritu Santo; Creacionismo, Pontificados, etc.; mientras que del bando contrario, están los otros demagogos, que en la boca pronuncian el grito de Richard Dawkins, Nietzsche, escepticismo, evolución, Big Bang, etc. Pero lamentablemente para ambos ha resultado como una pelea sin sentido, una aberración para los dos caminos que creen decir la “verdad”, indubitablemente nadie tiene la verdad absoluta, según mis paradigmas
. Porque no contener toda esa rabia e ira para trabajar por algo mucho más productivo y en ves de gastar todo el dinero en hacerse publicidad para pelear como engendros del demonio que son, ¿porqué no se unen y reúnen todo ese dinero para darle de comer a los niños en África? ¿Ehh? ¿Es qué acaso no pueden suprimir su patético y ridículo orgullo? Simplemente webones.
La manera de no hacer demagogia es tener una humildad que se rija por el respeto, la ética y la moral, así
por lo menos se puede ir conteniendo y gradualmente va desapareciendo en su entorno, procurar fijarse en los objetivos y explicar de manera objetiva y comprensiva sus puntos, y evitar en lo posible cualquier palabrería estúpida que su boca les haga mencionar. Recordad: “La lengua es el castigo del cuerpo”, es hora de aprender y no tirar a la basura nuestras enseñanzas que vamos fortificando a través del tiempo. Seas ateo, creyente, político o ciudadano, esto va para ti, si eres demagogo, por lo menos sabes que debes evitarlo, y si no lo eres procura no caer en algo tan horrible como la demagogia.